A pesar de lo que somos, decimos u hacemos, Dios siempre sabe sacar lo mejor de nosotros. A pesar del escepticismo de Natanel, esto fue lo que ocurrió:
“Cuando Jesús vio a Natanael que se le acercaba, dijo de él: He aquí un verdadero israelita, en quien no hay engaño“. Juan 1:47 RVR1960
Dios nos conoce a la perfección, no podemos deslumbrarle con nuestros dones y capacidades porque lo que tenemos nos lo ha dado Él.
¡Lo mas precioso es que tampoco le asustan nuestros errores, defectos, insuficiencias y pecados!
Que Dios os bendiga esta semana,
Carmen Aparicio